jueves, 21 de enero de 2010

X CERTAMEN LITERARIO “VIVIR EN EL GUADIATO”

¿Quién pone en duda que los adolescentes no tienen imaginación, creatividad, sensibilidad y esperanza?
Una vez más, nuestros alumn@s han vuelto a brillar y destacar en el X certamen literario “Vivir en el Guadiato”, convocado por el Área de Cultura de la Mancomunidad de Municipios Valle del Guadiato.
Este tradicional certamen va dirigido a escolares de Primaria, Eso, Bachillerato y adultos de nuestra comarca, abarcando distintas modalidades de poesía y relato corto.

Desde aquí, damos nuestra más enhorabuena a los tres premiados, que han sabido demostrar sus cualidades y mostrarnos una parte de lo que son, adolescentes que tienen a flor de piel sus sentimientos, sueños, inquietudes…

Nuestra FELICIDADES a los premiados:

Pilar Campos García…….2º E.S.O (1er. Premio Poesía ESO-Bachillerato)
Álvaro Murillo Ortiz………1º E.S.O (1er. Premio Relato Corto ESO-Bachillerato)
Víctor Manuel Sánchez Paterna…..1º E.S.O (2º Premio Relato Corto ESO-Bachillerato)

La entrega de estos premios se llevó a cabo el pasado viernes 18 de diciembre, a las 19'30 h., en el Teatro Municipal Lope de Vega de Fuente Obejuna y contó con la presencia, entre otras autoridades, de Dña. Isabel Cabezas Regaño, Alcaldesa de Fuente Obejuna, de D. Maximiano Izquierdo Jurado, Presidente de la Mancomunidad del Guadiato y de D. José Ignacio Expósito, Concejal de Cultura de Peñarroya-Pueblonuevo.



CÓMO TE QUIERO

Mi pueblo
¡Cómo te quiero!
Eres agua cristalina
que baja por las montañas
y llega hasta los riachuelos
al Guadiato a descansar


Eres rocío de mayo
con los balcones abiertos
y una suave mirada
por donde entra el aire fresco


Mi pueblo
¡Cómo te quiero!
Eres una llama encendida
de ese carbón todo negro
que alumbra con su calor
las callejas de este pueblo


Eres azúcar y sal
con sabores excelentes
con amores que son dulces
y que gustan a sus gentes


Mi pueblo
¡Cómo te quiero!
Eres como un torbellino
que un día apagó su voz
con la gente que tuviste
hoy muy tranquilo quedó


Eres luz y una esperanza
que tenemos puesta en ti
pues somos gente con alma
los que vivimos aquí.

Pilar Campos







“El Pollo, El Peral Y La Guerra”

Érase una vez en una granja de Fuente Obejuna en la que vivían un padre y sus tres hijos. Tenían una gran variedad de árboles frutales como: manzanos, naranjos, perales, parras, olivos, encinas….
Pero había un peral que no daba peras y los hijos lo querían cortar, pero el padre se lo prohibió porque decía que era un peral mágico y los hijos obedecieron.

Al cabo del tiempo, en el peral apareció una pera y el padre le dijo al hijo mayor:

- Hijo, ésta es tu pera y esta noche deberás cuidarla para que no te la roben.

El mayor asintió y se fue a jugar toda la tarde y por la noche estaba cansado y se quedó dormido enseguida al pie del peral.

A la mañana siguiente, la pera no estaba y fue a decírselo a su padre, éste se puso muy triste y le dijo al mediano:

- Esta noche te tocará a ti.

El mediano también asintió y se fue a jugar. Por la tarde apareció la pera del mediano y por la noche estaba cansado y se quedó dormido subido al peral.
A la mañana siguiente, la pera no estaba y fue a decírselo a su padre. Éste se puso más triste que antes y esa misma mañana apareció la pera del pequeño. El padre le dijo que no le pasara como a sus hermanos y esta noche le tocaría a él.

El pequeño se preparó y se fue a dormir, gracias a esto por la noche no tenía sueño y se quedó vigilando hasta que empezó a temblar el suelo y vio que se acercaba un pollo, pero no un pollo cualquiera, sino un pollo GIGANTE y cogió la pera. Pero el pequeño le cortó una oreja con su navaja y el pollo se fue sangrando, con la pera en el pico.

Por la mañana, el pequeño se lo dijo a su padre y éste le dijo que fuese con sus hermanos a recuperar las peras, siguiendo el rastro de sangre.
Los tres hermanos se prepararon y partieron en busca del pollo gigante para recuperar las peras.
Siguiendo el rastro de sangre llegaron hasta un pozo de Belmez. El rastro de sangre se metía en él. El hermano mayor sacó una cuerda y bajaron al pozo; al mayor, el agua le llegaba por las rodillas; al mediano, por la cadera y, al pequeño, por el ombligo; allí siguieron por un túnel que les llevó a un río subterráneo. Se metieron nadando en las aguas que se hallaban debajo del castillo de Belmez. Allí encontraron otro pozo por el que salir. Cuando consiguieron salir, vieron un valle muy bonito y divisaron el rastro de sangre del pollo.
Al seguir por su camino se encontraron un río de tinta; el mayor se negó a continuar, los otros dos continuaron con el paseo; al rato vieron otro río, pero éste era de sangre y esta vez fue el mediano el que no quiso continuar. El pequeño fue el único que quiso continuar, al rato se encontró con el río “Guadiato”, de agua pura y cristalina en el que se podía reflejar su rostro en él. El pequeño se bañó en él de manera que toda la suciedad de los otros dos ríos se le quitó.
Al salir del “Guadiato” siguió el rastro del pollo, hasta que encontró una cueva del Peñón de Peñarroya-Pueblonuevo en la que se oían gemidos.
El pequeño se acercó a ella con un poco de miedo, pero eso no impidió que continuase. Se asomó a ella y vio al pollo tumbado en el suelo y echando sangre por la oreja, las peras estaban a su lado; se acercó a él cuidadosamente y procuró no molestarle. De repente la mirada indecisa del pollo se dirigió hacia él y el niño le dijo:

- ¡Tranquilo! No te haré nada, yo…sólo quiero saber por qué robaste las peras mágicas.

(Hubo un gran silencio) En un momento parecía que el pollo iba a hablar, pero calló.

- Vamos, amigo, no te preocupes por mí que no te haré nada- dijo el pequeño.

Se acercó y se sentó junto a él, le vio la herida sangrienta y decidió ayudarle y curársela. De la mochila sacó una toalla y alcohol, se dirigió a la herida y le dijo al pollo:

- Mira, te voy a curar la herida, porque yo he sido la causante de ella.
Poco a poco fueron cogiéndose confianza…

- Buena ¡ya está!, te curé la herida, ya no tienes que preocuparte por eso, ¿vale?.
- Gracias por todo, has sido una buena persona, pero…me gustaría poder concederte tres deseos, porque yo me alimento cada 1000 años concediendo el mismo número de deseos que peras crezcan en algún peral mágico.
- ¿Tres deseos?- dijo asombrado.
- Sí, uno por pera.
- Mmm… ¡Vale!, el primero es que mis hermanos lleguen sanos y salvos a casa.
- Mmm… Me parece bien- Chasqueó los dedos y los concedió.
- Mmm… El segundo es tener una nueva casa y dinero para mantenerla a ella y a mi familia.
- Como desees- e hizo el mismo procedimiento.
- Y por último… no sé… ¡AH CLARO! Quiero que recuperes tu oreja.
- Eres muy generoso ¿sabes? Toma, te mereces esto.

Mágicamente apareció un amuleto que le entregó el pollo.

- Cada vez que estés en peligro o necesites mi ayuda, apriétalo con fuerza y yo acudiré al momento, ¿vale?.
- Vale.
El pollo le llevó a su nueva casa, donde se reunió con su padre y sus hermanos; se despidieron prometiendo no olvidarse jamás el uno del otro.

Pasaron los años y el niño creció y se hizo un hombre, el Valle del Guadiato entró en guerra con un Valle lejano.
El amigo del pollo fue obligado a ir a la guerra con sus dos hermanos. En el campo de batalla, el amigo del pollo apretó fuerte el amuleto que le dio cuando se conocieron. Al cabo de un rato apareció un pollo gigante, en el cual se subió su amigo y juntos derrotaron al ejército enemigo que huyó despavorido al ver a semejante animal.

El rey lo llamó a él y a sus hermanos y les dijo que pidiesen lo que quisieran: el mediano sugirió la mano de las princesas del Guadiato y a los otros dos hermanos les pareció bien. El rey estuvo de acuerdo y al mes siguiente se celebraron las tres bodas. En ellas, el encargado de llevar las alianzas fue el pollo gigante.

Vivieron en el Guadiato y comieron mucho pato.

Álvaro Murillo






Leyendas del Guadiato

Capítulo 1

Hay una antigua leyenda que cuenta la creación de la comarca del “Valle del Guadiato”. Once niños y niñas se fueron de sus respectivas aldeas a un lugar donde nadie los encontrara para vivir aventuras emocionantes, pero no sabían por dónde empezar.

Hilfus, uno de los niños, empezó a buscar un lugar donde dormir por la noche. Buscó y buscó por bosques, valles, cuevas y al final lo encontró. Era un árbol muy grande cuyas hojas eran como unas camas blanditas, calentitas pero no eran tan pesadas y se podían enroscar y llevar en la espalda. Hilfus pasó la noche entre sus hojas y, por la mañana, arrancó una de ellas y se la llevó en la espalda.
Después, Hilfus buscó comida en un valle, y vio la silueta de algo que iba hacia él.

Capítulo II

De repente, la silueta se abalanzó sobre Hilfus, pero la “hoja-cama” ablandó el golpe. Hilfus se dio cuenta de que la silueta pertenecía a una muchacha pelirroja, que se levantó de un salto y empezó a decir:
- “Lo siento, pensé que eras un animal.”
- “Te perdono, pero dime, ¿quién eres? – le preguntó Hilfus
- “Soy Ileya, de la aldea de los Sayan”
- “Yo soy Hilfus, de la aldea de los Waran.
- “Perdona ¿qué es eso que llevas en la espalda?”
- “Es una “hoja-cama”
- “¿Dónde la has conseguido?”
- “En aquel árbol”
- “Espérame un momento”

Y de repente, la chica desapareció al instante. Hilfus cerró los ojos y escuchó un grito desgarrador que provenía del árbol.

Capítulo III

Hilfus fue corriendo hacia el árbol y se encontró con Ileya pisando algo que había en el suelo y que parecía un ser humano.
Hilfus intentó ayudarle pero Ileya le dijo:
- “No lo hagas”
_ ¿Por qué?”- le preguntó Hilfus
- “Porque es un asesino”
- “Yo no soy un asesino”- dijo el bulto que había en el suelo.
- “Y entonces ¿cómo es que tienes un cuchillo ensangrentado?”- dijo Ileya.
- “¿Cuántas veces tengo que repetirte que es un cuchillo con el que he cortado una sandía?”- volvió a decir el bulto.
- “Ileya, yo le creo”- dijo Hilfus.
- “Bueno, pues que nos lleve al lugar donde se ha encontrado esa sandía, pero, primero, ¿cómo te llamas?” – dijo Ileya.
- “Me llamo Piclus, de la aldea de los Esclaiders”.
- “Como ya sabrás, mi nombre es Ileya, de la aldea de los Sayan”
- “Y yo soy Hilfus, de la aldea de los Waran”
- “Os llevaré hasta ese lugar”- dijo Pilcus.

Llegaron a un lugar en el que encontraron unas matas cuyas hojas eran como finos hilos colgando de ramas en cuyos extremos había frutos (sandías). De repente, se oyó una voz que provenía de una mata alejada diciendo:

- “¿Quién osa entrar en mi territorio?”
Ileya dijo: - “Pues nosotros, ¿quién si no?
- “Y ¿qué queréis?”
- “Pues queremos uno de tus frutos”- respondió Hilfus.
- “Pues tendréis que pasar por encima de mi cadáver”.

Y algo se lanzó sobre ellos……..

Capítulo IV

Cuando lo que se lanzó sobre ellos tocó el suelo, tembló la tierra de tal manera que Ileya, Piclus e Hilfus se cayeron y, sin atreverse a mover, observaron que, en realidad, era un muchacho.
El chico les preguntó:
- “¿Qué pasa? ¿Ahora no queréis robarme mis frutos?”
- “¿Dirás nuestras sandías, verdad?”- dijo una chica que apareció junto al muchacho.

La chica fue hacia Hilfus y le puso el pie sobre la cara, diciendo:

- “ A éste nos lo comeremos esta noche, hermanito”.
- “¡Vale!”- respondió él.

Ileya se levantó de un salto y le propinó un fuerte golpe al chico que lo dejó inconsciente y la chica empezó a llorar.

- “No me hagáis daño por favor”
- “No te lo haremos pero tienes que dejarnos marchar”-dijo Hilfus.
- “Vale, pero dinos, nos dejaríais ir con vosotros”-añadió la chica
- “Por mi vale”-dijo Piclus
- “Antes de irnos me gustaría deciros nuestros nombres. Nosotros somos Lavanda y Estrico”.
- “Nosotros somos Ileya, Hilfus y, yo, Piclus”

Capítulo V

-“Podríamos crear una comarca en donde viviéramos todos juntos como una familia”-propuso Ileya
-“Nos parece bien”- dijo Lavanda
-“¿Pero de dónde vamos a sacar los materiales?”- preguntó Piclus
-“Ya veremos”-dijo Estrico

Empezaron creando 6 pueblos que fueron Fuente Obejuna, Peñarroya-Pueblonuevo, Espiel, Belmez, La Granjuela y Los Blázquez.
Un día de mayo los niños estaban tan tranquilos cuando vieron que 3 niños y 3 niñas se acercaban a ellos diciendo:
- “Os gusta nuestro territorio, ¿a que sí?”
- “¿Vuestro territorio?” – preguntó Ileya
- “Si te refieres a los pueblos de la comarca, sí, pero ¿quiénes sois vosotros?”-dijo una de las chicas.
- “Estáis hablando con los creadores de esta comarca, Ileya, Hilfus, Lavanda, Estrico y Piclus”
- “Nosotros somos Hacu, Isku, Lacri, Efito, Sue, Pasku y venimos a arrebataros la comarca.”-dijo Lacri
-“Pero en vez de hacer eso podríamos ser amigos y que vosotros crearais 5 pueblos más”
-“Vale, pero cada uno dirigirá un pueblo”-dijo Hacu
-“Vale”
Y crearon otros 5 pueblos que fueron: Villaviciosa, Obejo, Valsequillo, Villaharta y Villanueva del rey
Prólogo
Así es como se creó el “Valle del Guadiato” esta leyenda irá pasando de generación en generación para que así todos los hijos de los hijos de los hijos sepan de dónde vienen y en dónde viven para que así respeten sus pueblos.



Víctor Manuel

miércoles, 6 de enero de 2010

VISITA DE SSMM LOS REYES MAGOS DE ORIENTE A LAS AULAS DE INFANTIL


Sorpresa, nervios, alegría e ilusión son los ingredientes imprescindibles para sentir la magia de los Reyes Magos.
Una jornada inolvidable para nuestros más pequeños. Sus caras, sus gestos lo dicen todo.

MENUDA NOCHE DE REYES


La iniciativa de nuestros alumnos/as de 5º de E. Primaria, nos ha llevado a recrearnos con una divertida representación teatral. Con espontaneidad, naturalidad y realismo, exponen un tema muy actual: el dilema entre montar el árbol navideño, o el portal de belén.


Con pocos medios, pero con mucho entusiasmo y muy bien organizados, nos han demostrado que saben trabajar en equipo, llevando a la práctica el mensaje navideño de esta obra:


CON UN POQUITO DE TOLERANCIA Y UN POQUITO DE RESPETO, TODO SE ARREGLA.



Felicidades al grupo de 5º y a su tutora M.Carmen Paterna por el trabajo realizado.

VIVIMOS EL ADVIENTO

Un año más nos hemos reunidos para celebrar todos juntos la venida del Salvador, acontecimiento muy importante para todos los que creemos que la SALVACIÓN nos viene de ÉL.

Esta celebración nos invita a que todos juntos recemos y reflexionemos sobre lo que infundió en nuestros corazones y que probablemente no seamos conscientes de ello. Oremos para que todos estos dones nunca desaparezcan.

SEÑOR: que no pierda LAS GANAS DE VIVIR , sabiendo que la vida en ciertos momentos es muy dolorosa.

SEÑOR: que no pierda LAS GANAS DE AYUDAR A LOS DEMÁS, aún sabiendo que mochos son incapaces de ver, reconocer y recompensar esta ayuda.

SEÑOR: que no pierda LAS GANAS DE AMAR, aún sabiendo que las personas a las que más amo, pueden no sentir lo mismo por mí.

SEÑOR: que no pierda EL EQUILIBRIO, aún sabiendo que innumerables fuerzas quieren que me caiga.

SEÑOR: que no pierda LA LUZ Y EL BRILLO DE LA MIRADA, aún sabiendo que muchas cosas que veré en el mundo, oscurecerán mi mirada.

SEÑOR: que no pierda LAS GANAS DE LUCHAR, aún sabiendo que la derrota y la pérdida son adversarios extremadamente peligrosos.

SEÑOR: que no pierda LA RAZÓN, aún sabiendo que las tentaciones de la vida son innumerables y deliciosas.

SEÑOR: que no pierda EL ABRAZO FUERTE, aún sabiendo que un día mis brazos estarán débiles.

SEÑOR: que no pierda EL AMOR POR MI FAMILIA, aún sabiendo que ella, muchas veces, me exigirá esfuerzos por mantener su armonía.

SEÑOR: que no pierda LAS GANAS DE DAR ESTE ENORME AMOR QUE JESÚS NOS TRAE EN SU NACIMIENTO, aún sabiendo que muchas veces será sometido y rechazado.
Y POR ENCIMA DE TODO, que jamás olvide que Dios me ama infinitamente, que mi pequeño grano de ALEGRÍA es ESPERANZA dentro de cada uno , y es capaz de cambiar y transformar cualquier cosa, pues la vida está construida en los sueños y concretada en EL AMOR.

lunes, 4 de enero de 2010

PREMIADOS LOS ALUMNOS/AS DE 1º E.P



Una originalísima postal han elaborado en grupo, los alumnos de 1º de Primaria, dirigidos por su profesora de plástica, Ani Gallego.

El fruto de este trabajo en común, ha sido recompensado con, el primer premio en la categoría infantil del concurso de postales navideñas, organizado por la Casa de la Juventud.
Una vez más enhorabuena a la señorita Ani, que ha sabido con creatividad motivar a los niños y confeccionar esta sorprendente felicitación de navidad.